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Jerome Powell ocupa el centro del escenario para las materias primas en los próximos días, con el jefe de la Reserva Federal listo para desencadenar otra gran subida de tipos que podría aumentar la presión sobre la energía, los metales y los cultivos.
El temor es que una medicina antiinflacionaria más fuerte del banco central de EE. UU. no solo apriete la demanda, sino que se sume a un aumento del dólar que está golpeando a las materias primas. Antes de la gran presentación de Powell el miércoles, los mercados han estado nerviosos: el oro se hundió a un mínimo de dos años, el crudo registró una tercera caída semanal y los metales están retrocediendo nuevamente.
“Un gran aumento de las tasas ahora está descontado en gran medida en los mercados, pero creemos que aún podría mantener los precios bajo control la próxima semana.
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También hay mucho que ver en otros lugares. Los líderes de Europa están tramando planes para luchar contra la crisis energética, con Alemania considerando nacionalizaciones. EE. UU. ofrecerá la información más reciente sobre la demanda de carne, y hay una serie de conferencias clave: sobre cobre en Barcelona, oro en Denver y clima en Nueva York y Pittsburgh. Con las tensiones geopolíticas al alza, la Asamblea General de la ONU también podría ser un foco.
Las tensiones previas a la Reserva Federal son más evidentes en el mercado de lingotes.
La inminente decisión sobre la tasa, junto con el lenguaje del banco sobre la inflación y los futuros aumentos, impulsará los próximos movimientos del metal precioso después de un mes de caídas constantes frente a un dólar sobrealimentado. Se espera que la Fed aumente las tasas en al menos 75 puntos básicos, pero un aumento mayor podría desencadenar aún más volatilidad en los mercados de divisas.
Los comerciantes de materias primas se preparan para Powell
Los fondos ya están huyendo del oro. Los fondos de cobertura y los administradores de dinero se han vuelto bajistas netos sobre el metal precioso. Algunos comerciantes creen que lo peor está por venir para el oro hasta que el lenguaje de la Fed sobre la inflación se modere, aunque otros apuntan a un soporte residual para los precios debido a los mayores riesgos geopolíticos y económicos. El compromiso de los largos restantes de lingotes está listo para ser probado.